Camarones: elige, compra y conserva correctamente

Sé un #ConsumidorInteligente y aprende cómo comprar los mejores camarones, así como a conservarlos de la mejor manera y evitar que se te echen a perder.
Aprende a elegir los mejores camarones y a conservarlos de la mejor manera
Conviértete en un experto en comprar camarones. No importa si son frescos, cocidos, congelados o secos. Checa estos puntos, verifica la calidad y llévate a casa los mejores.
Camarones frescos
CÓMO COMPRAR
- Adquiere aquellos que estén refrigerados o sobre una cama de hielo gruesa. Te recomendamos este video
- Su carne debe ser firme, traslúcida grisácea y sin manchas. Evita los que se sientan babosos.
- Los más frescos son aquellos con ojos negros, saltones y brillantes. Evita los que les falten ojos o los tengan hundidos.
- Su cáscara debe estar completa, brillante, de color uniforme, traslúcida y sin manchas, excepto si son camarones tigre.
- Su olor debe ser suave, a agua marina. Si huelen a amoniaco indican un estado de descomposición; si huelen a cloro significa que fueron enjuagados para enmascarar olores desagradables.
- Cómpralos al final de todas tus compras, así pasarán menos tiempo a temperatura ambiente y evitarás el desarrollo de bacterias.
CÓMO CONSERVAR
- Mantenlos en refrigeración hasta que los vayas a preparar.
- No los conserves así por más de dos días, de lo contrario mejor congélalos.
Camarones congelados
En este estado su vida útil es de las más largas. Los puedes encontrar precocidos, crudos, con cáscara, con cabeza o en pulpa de camarón. Son muy confiables, pues se congelan en el punto de pesca en un estado inmejorable de frescura.
CÓMO COMPRAR
- Verifica que estén completamente congelados.
- Rechaza los paquetes abiertos, rotos o aplastados de los bordes. Si tienen escarcha o cristales significa que han estado más de un año en congelación o se han descongelado y vuelto a congelar.
CÓMO CONSERVAR
- Una vez que los descongeles no los vuelvas a congelar.
- No los dejes más de 6 meses en el congelador. Pasado este tiempo su calidad baja.
Camarones secos
CÓMO COMPRAR
- Deben estar completos con cáscara y cabeza. Rechaza aquellos que estén troceados.
- Verifica que estén libres de partículas ajenas, como tierra, insectos o moho.
- Deben ser de tonos que van del naranja brillante al beige, dependiendo del tiempo y condiciones de su almacenaje. Prefiere los primeros.
CÓMO CONSERVAR
Al haber pasado por un proceso de desecación y salado, su vida útil es larga y no necesitan refrigeración.
- Almacena en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar.
- Utiliza un envase de vidrio con tapa o una bolsa de plástico hermética para guardarlos, así conservarán por más tiempo su sabor y los insectos se mantendrán lejos.
Camarones cocidos
CÓMO COMPRAR
- Revisa que la carne esté firme y húmeda, con tonos que van del blanco al rosa y manchas rojizas por fuera.
- Su olor debe ser casi imperceptible, rechaza aquellos con olores fuertes o desagradables.
- En el punto de venta verifica que estén separados de los mariscos crudos, pues podrían estar contaminados.
- Si son camarones macuil o para pelar, la cáscara debe ser firme y estar pegada a la carne.
- Si la cabeza, antenas o patas se desprenden fácilmente significa poca frescura. Su color debe ser naranja claro brillante.
- Si son camarones pacotilla, checa que no huelan a amoniaco o que su carne esté seca.
CÓMO CONSERVAR
- Tienen una vida útil más larga en comparación con los crudos pues ya pasaron por una cocción. Pueden estar hasta 4 días en refrigeración.
- Almacénalos en un recipiente hermético o una bolsa de plástico hermética.
- No los congeles, pues su sabor y calidad desmejora.
Fuentes: Larousse Cocina, www.fda.com, www.seriouseats.com, www. profeco.gob.mx/guiadepescadosymariscos