Café Budapest conserva las recetas tradicionales de 1930 Hay un túnel del tiempo escondido en una de las calles que rodean al parque Lincoln; si […]
Café Budapest conserva las recetas tradicionales de 1930
Hay un túnel del tiempo escondido en una de las calles que rodean al parque Lincoln; si logras cruzarlo te transportarás al Budapest de 1930, antes de la Segunda Guerra Mundial. Café Budapest está repleto de fotos y antigüedades, pero sobre todo de sabores tradicionales, puesto que Gabriela, la dueña, prepara los postres, el café y el té con los ingredientes y recetas originales, como lo hacía su abuela.
Este rincón en Polanco guarda la nostalgia de aquel tiempo, antes de la guerra, cuando la gente se reunía a tomar el té con galletas. Por eso en Café Budapest verás objetos antiguos traídos de la casa de Gabriela, la dueña de la cafetería, así como fotografías en blanco y negro de sus bisabuelos.
Atrévete a cruzar el pasillo, a tomar el té en tazas antiguas –valoradas como tesoros sobrevivientes de la guerra– y a descubrir postres como el saje: pastel de chocolate que en lugar de harina está hecho con nuez y avellana molidas, o el pay de requesón, acompañado de un café turco.
Para ordenar un té te traerán la carta: unos tubos de ensayo con las especias de los diferentes tés que tienen, ábrelos y deja que el olor te ayude a elegir. En su barra encontrarás los postres: mermeladas hechas en casa, strudel de manzana, saje de chocolate, galletas tradicionales de Hungría –servidas como en ese tiempo–, pay de manzana, galletas cubiertas de chocolate y aros de avellana con nutella.
La tranquilidad del lugar te absorberá, así que quédate un rato más para probar las crepas saladas: de queso, champiñones y carne, o las empanadas hechas en casa. Los fines de semana, en Café Budapest tienen una pizza frita con papa, ajo, crema y queso.
Si tienes ganas de algo más fresco, cruzando la calle, en la tienda Uncommon People hay otra sucursal de Café Budapest, sólo que aquí hallarás tés fríos y una terraza más amplia para que te fumes una shisha.