El manual del buen rebelde

“Esta guía, la cual ha sido compilada y editada por Anonymous-affiliated, veteranos de revoluciones y de otras ocasiones en las cuales los civiles han tenido éxito en la lucha contra las fuerzas de seguridad, pronto tendrá traducciones al francés y árabe y serán adjuntadas pronto. Distribúyase a los pobladores de Egipto y a otros partidarios relevantes vía fax, así como en foros y otras formas que sean accesibles para todos los que necesiten y para aquellos a los que se pueda asegurar que lo recibieron. Éste es un suplemento especial de la serie de Guide to protecting the North African Revolutions (Guía para protegerse en las revoluciones de África del Norte), la cual ha sido distribuida los meses pasados a los habitantes de tunecinos, argelinos, egipcios y otros.”

Así comenzaba el documento redactado en parte por el periodista actualmente preso, Barret Brown. El manual venía dentro de una memoria USB amarilla –que llegó a mis manos de una manera que prefiero no hacer pública– con las siguientes instrucciones: “Baja la carpeta tal, ahí viene todo lo que necesitan saber para el 1 de diciembre”, me recomendó mi fuente. Estábamos a 26 de noviembre de 2012 y se acercaba el 1 de diciembre, día en que el PRI regresaría a los Pinos y en el movimiento #YoSoy132 nos preparábamos para protestar afuera de la Cámara de Diputados. Esperábamos que intentaran reprimirnos, así que no estaba de más prevenirse.

El rostro sin máscara de Anonymous

Barret Brown es un escritor y periodista independiente que ha trabajado para The Guardian, Al Jazeera y The Huffington Post, entre otros medios; lo más relevante de este personaje es que ha aparecido en varias entrevistas y videos de YouTube como un rostro desenmascarado de Anonymous. Aunque él no se proclama como vocero del grupo “hacktivista”, los medios lo describen como tal.

En cuanto a su relación con nuestro país, en 2011 Brown jugó un papel relevante como enemigo de los Zetas al declarar que revelaría, a título personal, 75 nombres de personas relacionadas con el cártel si no liberaban a un integrante de la mayor red de activistas internautas que había sido secuestrado en Veracruz.

Al momento de la liberación, los zetas amenazaron con el siguiente mensaje: “Si Anonymous devela algún nombre relacionado con el cártel, la familia del anónimo retenido sufrirá las consecuencias: por cada nombre del cártel revelado, diez personas serán ajusticiadas”. Después de la liberación, la #OpCartel fue cancelada y la situación fue declarada como una tregua.
Barret Brown es famoso por su parecido con la pluma de Hunther S. Thompson, el padre del periodismo gonzo, y por su ferviente activismo; tiene su propio grupo activista online que se llama Project PM, el cual es considerado como un lugar en Internet para investigar a las industrias de la secrecía cibernética, los regímenes totalitarios y todo lo que atente en contra de los derechos humanos y la democracia.

Brown fue arrestado desde septiembre de 2012, y hasta la fecha enfrenta un juicio por alegar en contra de un agente del FBI a través de su canal de Youtube.

No se viste de seda

Al leer la biografía de dicho personaje, mi curiosidad se acrecentó por conocer el contenido de la carpeta dentro del USB amarillo. Al abrirlo, descubrí que el Manual de insurrectos contemplaba prácticamente todos los posibles escenarios y situaciones por presentarse en una manifestación o revuelta pública. Parecía, más que recomendaciones a seguir, un oráculo para el rebelde. No dispersarse en tal o cual situación pero sí de manera estratégica cuando la policía ataque, cómo vestirse para ir a marchar, qué productos usar como repelentes para bombas de gas pimienta, cómo alimentarse en un día de protestas, qué medicamentos llevar en el botiquín e incluso qué actitud adoptar frente al caos y al pánico, eran algunos de los temas que se trataban en el documento.

El 1 de diciembre del 2012 mis compañeros y yo pusimos en práctica varios de los consejos que anteriormente sirvieron a los egipcios. A continuación, algunos extractos de su contenido.

PRINCIPALES CONSEJOS PARA UN INSURRECTO

A. Compra un casco
Será lo primero que agradecerás haber llevado. Cuando las balas de goma te rozan la nariz es justo lo que piensas. A las afueras del Congreso de la Unión fuimos constantemente atacados por gases lacrimógenos y agua a máxima presión. En muchas ocasiones nos dispararon directamente a la cabeza, a menos de diez metros de distancia. En efecto, agradecí llevar un casco de motocicleta.

B. Cúbrete con un paliacate
El manual hacía hincapié en que si representas una amenaza para un interés, cualquiera que éste sea, aquellos que defienden ese interés intentarán neutralizar a la amenaza, y qué mejor protección, entonces, que el anonimato. En segundo lugar, un paliacate te cubre de gases lacrimógenos, gas pimienta y granadas de fragmentación. Varias capas de ropa ayudan a aligerar los golpes que eventualmente te puedas llevar.

C. Lleva una máscara de gas y googles
Una de las situaciones más escabrosas que me tocó presenciar fue ver a un joven con los párpados completamente quemados por recibir gas lacrimógeno de primer impacto (el manual te recomienda que ni siquiera portes tus lentes de contacto, pues los riesgos de quedarse ciego son altos). Para lavar el gas se recomienda utilizar refresco de colas y vinagre, nunca agua. Estos líquidos neutralizan el ardor.

D. Lleva tenis cómodos
Si te dispones a marchar y sabes que probablemente serás perseguido, calza tus mejores tenis. No hay que correr en zig-zag para evitar el peligro, simplemente huye de forma despavorida.

E. Súrtete de medicinas
Resulta fundamental ir preparado con medicinas, vendas y desinfectante a toda protesta social. Sin embargo, el documento recomienda a las personas que acaban de ser gaseadas no utilizar alcohol. Curiosamente las toallitas femeninas sirven perfectamente como cubrebocas en caso de enfrentarte al temido gas. Igualmente, el documento aconseja llevar un antiácido, preferentemente sabor menta.

F. Come chocolates
El manual subraya la importancia de mantenerse hidratado, debido a que participar en una protesta representa hacer mucho ejercicio, en ocasiones bajo el rayo del sol. El manual recomienda no abusar de las proteínas, porque resultan más difíciles de digerir que otro tipo de alimentos, lo que hará más lento a quien las coma. Por el contrario, alienta comer más carbohidratos y azúcares; por ejemplo, se puede cargar una mochila con chocolates y galletas endulzadas de avena.

G. Lleva flores y poesía
Ganarte a miembros de la policía o el Ejército es una buena idea. “Si recordamos, históricamente es el Ejército el que ocasiona los golpes de Estado, pero ¿qué sería de una revolución si no está el Pueblo uniformado del lado de su gente?”, asegura el documento. Recitar poesía a los policías, la gran mayoría de las veces, pudiera mover una fibra sensible de los enviados a reprimir la manifestación. Las rosas, añaden los autores del documento, ayudan en ciertos casos.

H. Consigue un megáfono
Se trata del instrumento de cabecera de todo buen rebelde. Un megáfono permite tener a tu contingente mejor organizado, así como dictar las consignas para que los demás las puedan escuchar y seguir. Los egipcios aconsejan en su manual que las consignas deben tener un lenguaje positivo y en pro de la libertad.

I. Delimita las vías de escape
El manual recomienda mantenerse en contacto con el resto del contingente en todo momento, tener un objetivo claro, para lo cual debe realizarse una breve reunión previa a la manifestación para saber cómo movilizarse en el momento, realizar un mapa del área que identifique las vías de escape y los sitios seguros para ocultarse. El manual egipcio establece como prioridad mantener a salvo a tu compañero de lucha.