#ParaQueBeas: Lo que queda del Tri

Amigos de Playboy, después de un mes muy complejo en mi dinámica laboral, hoy regreso con estas ideas y prometo no fallar todos los juebebes con el ¡Para qué Beas? con sus gustadas secciones: #noseconfundan, #derechodeadmisión y toda la #gozaderatotal. Pero antes les dejo mi reflexión de estos días: 

 

Aún no se conoce la solución. El típico tramo inquieto y fortuito de una cara que no descansa al sentarse en ese banquillo del técnico nacional (sea el que sea). La fachada del glamour verde y hoy amarillo vía la televisión y la necedad del alma en la cancha de Televisa. La famosa solución mexicana de tapar los baches después de cada temporada de lluvias sin cambiar el asfalto o dejar de construir en zona prohibidas. Palabras sin fondo pero con mucho estilo en todos nuestros medios masivos de comunicación. Hoy pongo corazón más que cerebro. Emoción más que razón. ¿De eso se trata el juego qué no? ¿Eso es lo que vendemos no? Historias, no productos. 

 

El desenfreno de las redes sociales ha podido manifestar la tendencia de un país engañado por unos cuantos, manejado al antojo de otros cuantos y consumido por las mayorías. El círculo vicioso es tan dañino como irrelevante. Me escribieron varios en mi “pajarito” que la culpa es la manera en la que “inflamos a la selección nacional”, nada tan incierto como eso. El problema es tan social y cultural que en estos días después de la vergonzosa forma en la que iremos al repechaje se han vertido una cantidad de ideas viscerales sin fundamento. Enojos innecesarios. La solución es muy sencilla: disfrutemos y suframos el deporte que amamos con el entendimiento total de esto. Es cierto que hay varios involucrados en esta empresa llamada Femexfut que perderán más que sus chambas, pero no desvirtuemos la razón fundamental del deporte: gozar y competir. Una vez más, nosotros no vendemos espejitos, ni sándwiches, ni tarjetas bancarias y ni mucho menos planes prepago, generamos pasiones apartir de un partido. No pasa nada trascendental con la derrota como tampoco algo de vida o muerte con la victoria. 

 

Aprendamos todos del contexto que hoy vivimos. Ha sido un año maravilloso con muchas lecciones cubriendo al Tri, (sí al peor Tri de la historia); pero después de la noche más amarga de mi carrera en Costa Rica me di cuenta de lo que sentía y pensaba: el futbol me sigue regalando grandes momentos para hacer lo que me gusta, contar historias apartir de momentos que desbordan tantas emociones, mi chamba no es salvar la vida de alguien o gobernar un país, es contar historias de un deporte tan pasional en las buenas y aún más en las malas. ¡Bienvenidos, bienvenidos! Al sentimiento en verde que tanto mueve a este bello pueblo tan futbolero.

 

Este fin de semana estaremos en Playa del Carmen gozando del pedazo de paraíso. Lo mejor es que el domingo estaremos corriendo una de las carreras que más prometen y siguen creciendo año con año. Se trata del Maratón de la Riviera Maya. Voy por 10kms, me echan porras el domingo a las 7am del nuevo horario ingratos.

Y seguro muchos defeños ayer bailaron o lo harán estos días en el Auditorio Nacional, sin duda esta rolita se perfila para ser una de las mejores del 2013, invariablemente te pone de buenas, a mover las caderas y a gozar de la vida… ¡vengaaaaaaaaa! ¡Vivir, vivir! ¡Auuuuuuuuuush!