11 ideal de cracks que jugaron con un solo club
El amor por los colores de su equipo, los convirtió en históricos del futbol
El futbol es un sentimiento que se lleva en la sangre y hay futbolistas que siguen eso como una máxima. La redonda se cruzó en su camino y ellos le devolvieron el favor de una manera inolvidable, jurando amor eterno para los equipos que les dieron su primera oportunidad. Claro, todas esas historias se escribieron en base a su magnífico talento. Cualidades inolvidables que los llevaron a brillar no solo para el equipo de sus amores, sino también, ser orgullo eterno de su país y de todo el universo futbolístico. Ellos son, el 11 ideal de cracks que jugaron con un solo club.
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Lev Yashin es considerado el mejor portero de todos los tiempos, pero su leyenda se forjó con un golpe de suerte. Y es que el guardameta en sus orígenes no era más que un trabajador de una fábrica que arreglaba aviones y en sus ratos libres jugaba de portero para el equipo de hockey hielo de la empresa.
Gary Neville fue uno de los futbolistas con más campeonatos en la época dorada del Manchester United. Ahora atiende los micrófonos y en su papel como comentarista lo que más odia es la mentira y a los futbolistas mercenarios. Obviamente tenía que ser un one club man.
En el país del catenaccio, Franco Baresi era el rey; un jugador que revolucionó la posición de líbero una década después del mítico Franz Beckenbauer. Ante todo, Baresi era el amo y señor de la zaga que infundía respeto y entraba fuerte al cruce, pero también era capaz de acariciar el esférico con delicadeza en sus profundas incursiones con el balón en los pies.
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Carles Puyol, todos conocen su garra y entrega, para los que lo hayan olvidado, sigue siendo el único futbolista en alzar seis títulos en una sola temporada, la del sextete del 2009 con Barcelona.
Paolo Maldini, simboliza la elegancia en estado puro, la anticipación en lugar de la intimidación. Un crack por los siglos de los siglos. En 24 años de carrera profesional siempre utilizó elástica rossonera del Milan.
Paul Scholes, asmático pero con una gran resistencia física (tanto que aguantó en activo hasta los 38 años), con un retorno a las canchas en 2012 tras salir de un retiro de seis meses. Bajo la batuta de su único entrenador, Sir Alex Ferguson, El Colorado ganó 11 Premier Leagues, además de 3 FA Cup y por supuesto, dos Champions, entre ellas la de una inolvidable remontada en solo tres minutos de 1999.
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Pocos jugadores tienen un estatus tan alto en el Dortmund como Lars Ricken. El alemán se hizo un hueco en la historia del club en 1997 cuando su instintivo disparo a los 20 segundos de saltar al campo como sustituto en Múnich permitió sellar el triunfo por 3-1 sobre la Juventus, un partido que permitió al BVB ganar su primera, y hasta ahora única, UEFA Champions League.
Ryan Giggs, un histórico con mayúsculas en el Manchester United. 22 temporadas disfrutó con el primer equipo y en cada una de ellas colaboró con un gol. Es el hombre más ganador en la historia del futbol inglés, en su palmarés extenso aparecen 34 trofeos, destacando 13 Premier League, cuatro FA Cups y dos Champions Leagues.
Mathew Le Tissier disfrutó de toda su carrera con el Southampton. Era un mago del balón a pesar de su redondo cuerpo. El 10 de los Saints cuenta con un récord fantástico: solo un penalti fallado de 50 cobrados. El mejor de la historia.
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Luigi Riva se convirtió en la figura del ascenso de un Cagliari que se volvió histórico. Su equipo le robó el título tras el ascenso a la poderos Juventus y los Bianconeri querían adueñarse de ese prodigio, así como el resto de monstruos en el Calcio. Gigi desechó cualquier oferta. Por cierto, Riva es el goleador histórico de la selección italiana con 35 bombazos.
Sandro Mazzola, un neroazzurro de por vida. Con el Inter disputó temporadas de gloria de 1961 a 1977 anotando 160 goles en 565 partidos. Su palmarés lo dice todo: cuatro títulos de campeón de Europa, dos Copas de Europa y dos Copas Intercontinentales con su único equipo, el de sus amores.