Héctor Moreno encumbra remontada del PSV
El mexicano firma el tanto del empate en la victoria 2-1 sobre el Manchester United
Héctor Moreno apareció con el PSV en el Philips Stadion tras cinco años de no disputar la Champions League. Pagó con creces la titularidad que le dio el entrenador del club Phillip Cocú. Tuvo una noche frenética, inolvidable por dónde se vea. Estuvo al pie del cañón en el momento más oportuno, cuando Bruma, su socio en la central falló, cuando el PSV más lo necesitó y para convertirse en un hierro que ayudó a los suyos a sacar la victoria 2-1 frente al Manchester United en el primer partido de la Fase de Grupos.
La afrenta en Eindhoven tuvo como protagonista también al mexicano Andrés Guardado que, pese a no dar su mejor partido de la temporada, tuvo un chispazo que permitió a los Granjeros marcar el tanto de la sentencia. El Principito robó cámara no solo por ello sino por el susto que se llevó tras recibir una dura entrada de Chris Smalling. Eso sí, ninguna de las tantas que hubo en el partido se comparó con la que sufrió Luke Shaw, quien terminó con fractura doble tras una jugada desafortunada en la que Moreno lo desarmó del balón.
Como era de esperarse el Manchester United propuso, dispuso y repartió el juego a su antojo. No estuvo Rooney en el ataque, pero no le hizo falta en el primer tiempo. A la cita con el gol acudió puntual el hombre del momento en los Red Devils, Memphis Depay. Se marchó en el verano como goleador y regresó como tal: soberbio en el mano a mano y con esa valía para enganchar al centro y mecer la red sin reparo. Hoy le cantó un gol a en la cara a toda la afición del PSV, atónita al verlo celebrar en grande.
Pero si Depay fue héroe con antelación hubo otros dos que lo eclipsaron. El primero fue el mexicano Héctor Moreno, el tipo más duro que pudo llegar para la central con el PSV. Lo supo la grada de Eindhoven cuando vio correr al mexicano con voragine para frenar a Luke Shaw y evitar el gol que pudo ser el 2-0. Y lo supo también Louis van Gaal, abrumado ante la jugada enérgica que terminó por dejar en camilla al lateral inglés. Moreno, siempre un profesional, reaccionó con un gesto de preocupación en señal de lamento por el infortunio.
El mexicano ratificó su valía cuando tras una jugada a balón parado marcó su primer gol en la Champions League. Apareció en el área tars un córner surgido tras uno de los contados contragolpes del conjunto holandés. No falló. Como si fuese ariete a cantó la anotación y lo hizo acompañado de todo el equipo que corrió a felicitarlo y hasta Philip Cocú, quien desde el banquillo celebró como si fuese el de la victoria.
De tú a tú, el PSV plantó cara y mostró porque es el campeón de Holanda. El entusiasmo no le falla y eso se vio en la cancha porque pese al dominio abrumador del Manchester United, que terminó con el 67 % de la posesión, se las ingenió para marcar el segundo gol. ¿Cómo le hizo? Fue un chispazo del mexicano Andrés Guardado el que lo permitió. El tricolor no tuvo una de esas grandes noches pero a cambio sacó una pincelada para robar el balón y ponerle un gran pase a Lestienne, cuyo recorrido fue centella y alcanzó a meter un centro que remató Narsignh con un frentazo picado imposible para De Gea. El Principito se mantuvo en pie de guerra hasta que Chris Smalling lo derribó con una fuerte entrada en el pie izquierdo que a los pocos minutos lo hizo salir del campo.
Aunque Van Gaal adelantó líneas y terminó con Fellaini, Martial, Depay y Valencia buscando deseperadamente el gol, el PSV hizo lo suyo y apretó cada espacio par asfixiarlos. Una contra de De Jong pudo poner el tanto decisivo pero el tiro se fue a la grada. El timonel recibió la primera alerta en la Champions League con una derrota que confirma el viejo adagio de futbol: “todo puede pasar cuando el balón está en juego. Hoy el PSV les metió freno, tomó la ciam provisonalmente del Grupo A y dejó la mesa puesta para la revancha en Old Trafford.