Jürgen Klinsmann, invencible ante México

El último duelo entre las selecciones del México y Estados Unidos se dio el 15 de abril del 2015, encuentro que el Tricolor perdió 2-0 y confirmó una singular hegemonía que se extiende desde hace 23 años. El récord no involucra a ambas escuadras en particular, sino que se trata de una racha individual: el alemán Jürgen Klinsmann tiene todos esos años sin caer ante la Selección Mexicana.

De 1982 a 1998, Klinsmann logró demostrar su calidad como jugador en varios equipos de Europa; calidad que lo llevó a vestir la elástica de la selección de Alemania por muchos años, y con la cual logró hacer historia, tanto por sus apariciones (109 encuentros) como por sus goles (47).

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México apareció por primera vez en la órbita del alemán en octubre de 1992, cuando con su selección enfrentó al Tricolor en un partido amistoso en tierras germanas; el duelo terminó 1-1. Diciembre de 1993 fue la época del segundo enfrentamiento entre Jürgen Klinsmann y el combinado azteca, que terminó con empate a cero en el estadio Azteca.

Nada de relevancia… hasta entonces.

Después de esos enfrentamientos, México comienza a ocupar un pequeño sitio dentro de la trayectoria del alemán, ya que el tercer enfrentamiento se daría en los Octavos de Final del Mundial Francia 1998. Luis Hernández adelantaba a los verdes, pero Klinsmann y Oliver Bierhoff le daban la vuelta al marcador, eliminando al Tri de la justa mundialista.

Acabando aquel mundial, Jürgen Klinsmana opta por el retiro, lo que significa que aquel gol fue el último que consiguió con la selección de Alemania.

Tal fue su papel dentro de la Mannschaft, que se ganó el cariño de la afición alemana, lo que lo llevó a la dirección técnica de dicha nación, poco tiempo después de su retiro.

Como técnico, el entrenador germano enfrentó a México por primera vez en la Copa Confederaciones del 2005, por el tercer lugar del torneo. El estilo de juego de Alemania, sumado a la calidad de sus atacantes, comandado por Michael Ballack, le dio la victoria 4-3. Un partido más para Klinsmann.

El dominio de México sobre Estados Unidos quedó de manifiesto en la Final de la Copa Oro del 2011, donde los entonces dirigidos por Bob Bradley terminaron cayendo por 4-2, lo que derivó en el despido del estadounidense y en la contratación del alemán, quien ya había iniciado un lazo dentro de territorio norteamericano en su retiro.

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Días después, México y Estados Unidos se vuelven a ver las caras en territorio norteamericano, con Jürgen Klinsmann en la dirección técnica del cuadro estadounidense. El resultado: empate a un gol, lo que deriva en el quinto partido sin caer ante los aztecas en su cuenta personal.

En agosto del 2012, México recibió a Estados Unidos en la cancha del Azteca. Y el equipo de las barras y las estrellas derrotó al conjunto tricolor por 1-0. Más allá del estadístico, Klinsmann lograba hacer historia con su equipo, al darles su primera victoria dentro de suelo azteca, situación que no habían conseguido en 24 encuentros pasados.

El siguiente encuentro fue un empate sin goles dentro de las eliminatorias mundialistas del 2013, lo que mantuvo vigente la racha invicta de Klinsmann.

El dolor vino en mayor grado para el Tricolor en la vuelta de dichas eliminatorias: el entrenador alemán lograba la victoria dos a cero en su territorio, con lo que conseguían el boleto a Brasil 2014, dejando en el limbo el pase de México. Otro gran triunfo para Jürgen Klinsmann.

Después de la tormenta… vino un encuentro amistoso en el 2014 entre ambas selecciones, quienes se preparaban para la justa mundialista de Brasil. Michael Bradley y Chris Wondolowski por Estados Unidos, y Rafa Márquez por el Tri dieron marcador al partido. El noveno de Klinsmann sin derrota.

El último partido se dio en abril de este año, con derrota azteca por dos a cero, llegando así el décimo partido sin derrota del estratega alemán ante México.

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“La rivalidad entre Estados Unidos y México es una de las mejores del futbol mundial. Es comparable a la que existe entre Alemania y Holanda en términos de la intensidad y emoción. Habíamos ganado algunos partidos contra países de peso, pero la reacción de todo el mundo cuando fuimos al Azteca y derrotamos allí a México por primera vez fue simplemente alucinante”, dijo Klinsmann al portal de la FIFA.

El alemán ha demostrado que la historia y estadística están de su lado. ¿El próximo sábado llegará el undécimo partido de Jürgen Klinsmann sin caer ante México?

Texto de Ramiro Ramírez