Los festejos más locos de la Liga MX

La Liga MX es el hábitat de la locura. No hay ejemplo más claro que la Liguilla y su Gran Final entre Pumas y Tigres. Hubo un tiempo durante la noche del domingo en que todo parecía definido. Daba la sensación de que todo sería sencillo para los pupilos de Ferretti pero nada estaba más alejado de la realidad. Los goles fueron cayendo poco a poco en la portería de Nahuel Guzmán, que guardó un mar de adrenalina para las instancias definitivas.

Ya en los penaltis, el guardameta argentino atajó de gran manera una ejecución de Javier Cortés que abrió la puerta para que, Israel Jiménez, con una definición magistral, decretara el cuarto título para Tigres. Ahí sí, el éxtasis traspaso fronteras y provocó un beso digno de la mejor película romántica, mismo que quedará en el catálogo de los festejos más locos dentro de la singular Liga MX.

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