Cuando Pumas evitó un tricampeonato al Cruz Azul
Ese día Hugo se despidió del futbol mexicano… y como campeón
El 6 de agosto de 1981, al final del partido de ida de la final de la temporada 1980-81 parecía que el pronóstico se cumpliría: Cruz Azul –bicampeón reinante– se impuso 1-0 a los Pumas gracias a la mayor experiencia de sus jugadores y al tanto de Adrián Camacho. “La Máquina ganó como lo que es: un gran campeón. La clave fue su sólida defensa y su flexible mediocampo”, llegó a comentar el periodista Fernando Marcos.
Bora Milutinovic, el técnico universitario, tomó ese descalabro con tranquilidad: “Nosotros hemos remontado marcadores más complicados, de ahí que no esté preocupado por la derrota”. Luego se aventuró a decir: “Estoy seguro que vamos a ganar en la vuelta. En Ciudad Universitaria será todo diferente”.
Tan seguro estaba Bora, que al llegar al vestidor empezó a darles palmadas a sus jugadores, mientras gritaba: “No es nada el 1-0, muchachos. ¡Vamos a ser campeones!”. A la voz del técnico, también se sumó la del presidente del club Guillermo Aguilar Álvarez quien dijo: “Levanten la cabeza, muchachos. No todo está perdido”.
Aunque los jugadores se manifestaron desconcertados. Ricardo Ferretti llegó a decir: “El resultado fue injusto por todo lo que intentamos, en cambio, ellos, en una falla nuestra anotaron el gol”. Hugo Sánchez, quien se preparaba para incorporarse al Atlético de Madrid, manifestó: “Para mí no habrá mejor despedida del futbol mexicano que irme como campeón, pero ahora se nos ha complicado un poco la situación”.
LEER MÁS: Pumas, más valio$o que Cruz Azul
Pumas impide el tricampeonato celeste
Llegó el 9 de agosto, día del juego de vuelta y los felinos evitaron que Cruz Azul consiguiera el segundo tricampeonato (y octavo título en su historia) de su historia al ganar claramente 4-1 con tantos de Hugo Sánchez, Ricardo Ferretti, Manuel Manzo y Enrique López Zarza. Ese fue el segundo título de liga de los Pumas.
El club Universidad se impuso gracias a su futbol veloz y vertical, que contrastó con la parsimonia de los cementeros. Por eso los felinos ya ganaban 3-0 cuando apenas habían transcurrido 27 minutos. Aunque los celestes consiguieron acortar antes del medio tiempo por medio del zaguero Rafael Toribio.
Para el complemento, Pumas salió más conservado, se dispuso a jugar con los nervios de su rival, que se quedó con un jugador menos tras la expulsión de Carlos Jara Saguier tras una dura entrada sobre Hugo. Con ese hombre de ventaja en la cancha, la UNAM finiquitó el marcador mediante el tanto de López Zarza.
Tras el silbatazo que puso fin al juego, Hugo, Negrete, Paolino y otros jugadores fueron levantados en hombros, en tanto, desde las gradas del estadio de CU provenía un coro que decía: “¡Bora, Bora, Bora!”. Luego también: “¡Hugo, Hugo, Hugo!”.
Tras los festejos, Milutinovic comentó: “Me da gusto porque el título lo ganamos ante un gran equipo y con un marcador amplio para que no quede duda”. Y añadió: “Ya lo había dicho: el 1-0 en la ida no era nada”.
Antes de que terminara el juego –al minuto 80– ya con el título casi amarrado, Hugo tuvo oportunidad de despedirse de sus aficionados al ser sustituido por Luis Flores: cuando se dirigía a la banda, levantó las manos en señal de despedida.
Instantes después, al haberse coronado campeón del futbol mexicano, Hugo habló de ese título de liga conseguido: “Es un campeonato más que se une al cartel que tengo en México, en donde soy considerado un crack. Pero en España, simplemente me ayudará para que se diga que actué hasta el último minuto para ayudar a mi equipo a conseguir el título”. Ni él mismo se imaginaba lo que conseguiría en el futbol ibérico.
LEER MÁS: 11 Ideal de jugadores que militaron en Pumas y Cruz Azul