Cinco polémicas de Diego Costa
El goleador del Chelsea dinamita la cancha con su lado conflictivo y antideportivo
Diego Costa es de mecha corta en el campo, cuando disputa el balón y se topa con algún aguerrido rival; más que inteligente es temperamental, vulnerable. El delantero del Chelsea pierde la cordura con facilidad y en el duelo ante el Everton de la FA Cup lo dejó más que claro: intentó morder al mediocampista del Everton, Gareth Barry, y lanzó un escupitajo al árbitro.
No es la primera vez que el delantero del Chelsea saca el cobre y ese lado pendenciero que lo traiciona. Por ello recordamos cinco ocasiones en las cuales ha dado de qué hablar por su actitud explosiva.
Manotazos con Laurent Koscielny y Gabriel Paulista | Durante la pasada temporada, Costa mostró una faceta poco amigable para quitarse la marca del rival. A Koscielny le asestó unos cuántos manotazos y poco después lo encaró y derribó en el área con un pechazo. En ese mismo partido desquició a Paulista, quien tras intentar calmar los ánimos cayó en la provocación y terminó por tirarle una patada que le valió la tarjeta roja.
Pisotones a Emre Can, Skartl y pleito con Gerrard | La Capital One Cup y los Reds recuerdan el futbol de barrio de Diego Costa. Y más que por genialidades, fue por la confrontación que tuvo con el legendario capitán del Liverpool, quien terminó en el piso por una falta del brasileño. Gerrard respondió a la provocación, intentó derribar a Costa y lo empujó. El brasileño no se quedó atrás y lo retó como si fuese un colegial. Al final los dos terminaron amonestados.
Guerra con Marquinhos | La Champions League de la temporada 2014-15 no fue la excepción y con el defensa del PSG tuvo un duelo de poder a poder. La jugada que lo retrata se dio después de que Marquinhos impidió a Costa meterse al área con un obstrucción. Instantes después, el brasileño no solo reclamó al árbitro, sino cual justiciero esperó el momento oportuno asestar un soberbio empujó al zaguero, que terminó comiendo pasto. Diego también tuvo piqués con David Luiz y Thiago Silva, y a este último le cometió una dura falta por detrás que le valió la tarjeta amarilla.
Escupitajos con Sergio Ramos | Durante un derbi contra el Real Madrid, Costa se enfrascó en un duelo con el tándem de centrales Sergio Ramos y Pepe. Hubo provocaciones de toda clase: desde los clásicos empujones a balón parado, mentadas y hasta escupitajos con mano negra. El delantero de los Colchoneros salió bien librado y al terminó del partido olvidó los puyazos con Ramos y Pepe y, con ya con la cabeza fría, a cada uno les dio la mano dentro del campo.
Teatro en estado puro | En 2013, durante un partido de Liga, el oriundo de Lagarto tuvo un partido para el olvido en el que, además de irse sin gol, recibió un cabezazo del defensa Juan Cala. Costa terminó amonestado -se perdió el derbi ante Real Madrid por acumulación de tarjetas- y el entrenador Diego Simeone tuvo que sustituirlo para poner tierra de por medio. El hispano-brasileño salió fúrico y, tras encarar a la afición del Sevilla, terminó con un rabieta en el banquillo.