El Boxeo de todas las latitudes enfermo de cancer
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El boxeo mundial de repente enfermó y el cáncer broto y como un mal que se expande por todos sus vericuetos, por todas las latitudes y las peleas que los aficionados demandan, las que quieren ver en el ring, solo son una utopía, no llegan a la realidad, porque los intereses, no de los boxeadores, sino de sus representantes, sus apoderados, los promotores, los patrocinadores y las televisoras, las hacen más que imposible de llevar a cabo y por eso ahora proliferan las peleas de nombres y no de hombres.
Ese cáncer que corroe al boxeo profesional en todas sus manifestaciones sin lugar a dudas está latente, está dañando al deporte de los puños, Ahora proliferan las peleas de nombres y no de hombres.
En la actualidad es difícil que los combates atractivos se puedan consolidar, los peleadores están firmados con un apoderado, este a su vez los tiene comprometidos con una promotora que sólo tiene nexos con una televisora, así los aficionados se ven afectados.
El cáncer negativo semana a semana se presenta en las pantallas chicas que transmiten combates desproporcionados, carentes de interés.
De esta manera los empresarios del boxeo cuentan con peleadores exclusivos para sus funciones, pero son peleadores fabricados e invictos con excelente record, pero basta con mirar su historial para ves que han derrotado rivales de muy poca monta, perdedores por naturaleza y con una marca de mas peleas perdidas que ganadas.
Otras de las verdades de este cáncer, es una clara diferencia de pesos, de estaturas y condiciones técnicas, entre otros motivos porque los promotores contratan adversarios para sus estelaristas de una división inferior a la de los que ellos representan, anomalía de la cual los comisionados se hacen de vista gorda y propicia combates desiguales que se resuelven por nocauts dramáticos o fingidos pues el débil evita el castigo del fuerte, rehúye las acciones, baja la bandera para perder, cae derrotado en lo que se llama “chambear la pelea” .
Este cáncer ya es común verlo semana a semana en las pantallas de televisión de una u otra empresa y en casi todas las funciones, no solo de México, sino en todos escenarios donde hay noches de guantes y por ende los aficionados de hueso colorado o de nuevo cuño protestan de manera airada pues se sienten engañados.