Neymar hace olvidar a Messi con sus genialidades

“Neymar, Neymar, Neymar”, esos han sido los gritos más que frecuentes en el Camp Nou desde el arribo del brasileño a la institución hace ya casi dos años y medio. Pero ante la lesión de Messi, las pleitesías para el crack con la elástica 11 del Barcelona no cesan y en ciertos momentos, provocan el olvido de gran parte de la fanaticada de un tal 10 azulgrana.

Neymar monta un show con sus gambetas partido a partido. No solo es su habilidad en el mano a mano, también son sus destrezas en el control de balón, el vértigo que imprime, su velocidad asombrosa, en fin, su capacidad al servicio del equipo, un Barcelona que de momento no sufre la ausencia de Messi y a falta del juego de Real Madrid se coloca como líder solitario de la Liga.

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En un partido atascado ante el Villarreal que contó con la participación de Jonathan Dos Santos los 90 minutos, Neymar descifró el código para vulnerar a la defensa rival. Barcelona dominaba como de costumbre pero el gol no llegaba. Hasta que el 11 blaugrana destacó con un control de maestro, digno del mejor futbolista de Brasil y en unos años, quizás del mundo. Busquets filtró un pase preciso y con bastante potencia. Neymar lo durmió como una almohada con su pierna menos hábil (si es que el crack cuenta con debilidades) y definió en un santiamén al primer poste de Areola. Zurdazo fantástico que hizo levantar al coloso y encaminar el duelo.

Barcelona se sintió cómodo y llegó el segundo. Un penal de Jaume Costa sobre Munir hizo posible la anotación de Luis Suárez. Pero faltaba el acto final, un detalle magnífico de Neymar que levantó a todo el estadio y maravilló al mundo entero.

En una contra fantástica del local, Neymar peinó para el 9 uruguayo en medio campo para pedir la devolución con un sprint eléctrico a la llegada del área grande. El brasileño controló con el bajo vientre y sintió la llegada por la espalda de un defensor del Submarino Amarillo. Como el mejor escapista decidió pronto y de la forma más complicada. Sin mirar tiró un sombrero, acto inimaginable. Dio la vuelta, superó a Jaume Costa y soltó un misil sin que el balón tocará el suelo.

El brasileño es el goleador de la Liga. Asombra con asistencias, goles fantásticos y a ratos, la ausencia de Messi se olvida. Ya lo dijo su descubridor Muricy Ramalho un tiempo atrás: “Neymar será el mejor del mundo cuando Leo afloje”.

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