¿Adiós a la hegemonía de la Juventus?

Al inicio del curso 2015-2016 la Juventus estaba a las puertas de algo histórico, nada más y nada menos que luchar por su quinto título en fila, situación que solo ha logrado en una ocasión la entidad italiana, 80 años atrás.

El objetivo estaba más que definido pero las dificultades para concretar la hazaña aumentaban. La temporada empezó como un diluvio que parecía interminable, su peor inicio desde el curso 70-71 y de hecho, la primera ocasión en su gloriosa historia que perdió los primeros dos choques ligueros. “Cero puntos en dos partidos es algo que no pertenece al ADN de la Juve. Necesitamos sentido de la responsabilidad. Volveremos a levantarnos y a demostrar apego a esta camiseta”, prometió el capitán Buffon en la catástrofe.

Los Bianconeri no consiguieron triunfo hasta la jornada 4 y en sus primeros seis encuentros solo cosecharon una victoria en patio ajeno, en Genoa. Tres descalabros y dos igualadas completaban sus tristes estadísticas.

Algunos llegaron a pedir la cabeza de Massimiliano Allegri. El estratega tenía claro que sería un proceso difícil. Afición y prensa esperaban un éxito rotundo de la Juventus tras acariciar el primer triplete de su historia, aunque al mismo tiempo se olvidaban de que el verano fue de despedidas para el club, tras la partida de Andrea Pirlo, Arturo Vidal y Carlos Tévez, piezas claves en la hegemonía reciente. “Hay que tener confianza en este grupo porque el campeonato es muy largo”, cita recurrente del técnico durante los momentos más complicados.

En la fecha 7 regresó la calma, con una victoria contundente frente al Bologna (3-1). Para la jornada 8 era turno de visitar al ahora líder, Inter, partido que culminó con un aburrido empate sin goles. En el Juventus Stadium, acumularon otra victoria  la jornada siguiente, contra el Atalanta, pero las alarmas se encendieron por una derrota más ante el sorpresivo Sassuolo (1-0).

“Hemos jugado una primera parte indecorosa. No hemos ganado ni un balón aéreo. Yo, con 38 años, no tengo ganas de naufragar como lo hemos hecho hoy”, relató triste Buffon luego de la cuarta derrota del curso en 10 cotejos. Y agregó: “¿Scudetto? Miremos la tabla, somos los 14º, habrá que centrarse en la 13ª plaza”, resolvió furioso ante la cuestión de que tan viable resultaba el apropiarse de un título más de manera consecutiva.

Esas palabras encendieron a la Juventus. El enojo de su capitán funcionó como catalizador. Ahora, los pupilos de Massimiliano Allegri van en una escalada fantástica, primero que nada en rendimiento, situación que ha privilegiado los recientes resultados: seis victorias consecutivas con 14 goles a favor y solo 3 en contra. En el desfile victorioso han caído Torino, Empoli, Milan, Palermo, Lazio y Fiorentina. Gracias a ese pleno de triunfos, la Juve trepó de manera eléctrica hasta el cuarto sitio, a solo seis puntos del Inter, con más de medio campeonato sin disputarse.

En el glorioso tramo, Paulo Dybala, fichaje estrella del club para sustituir a Carlos Tevez en la delantera, se ha transformado en el héroe del club, cuatro goles y tres asistencias ha registrado y parece que este repunte los encamina al quinto Scudetto, situación soñada para el club.

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