Dos grandes triunfos de Colombia sobre Argentina
PRIMERA PARTE | D10S fue un fantasma | Copa América
Argentina y Colombia se enfrentan en los Cuartos de Final de Chile 2015. Será su enfrentamiento número 13 en la historia de la Copa América. Y aunque la historia está a favor de la Albiceleste -siete triunfos y tres empates-, hay dos capítulos en los que los Cafetaleros le han infligido dolorosas derrotas a sus rivales de este viernes.
D10S fue un fantasma
Tenía poco de haberse instalado en el gobierno de Colombia, en 1982, cuando Belisario Betancur adoptó una medida poco popular entre la población. El presidente comunicó a la FIFA que, por falta de recursos e infraestructura, su país renunciaba a organizar el Mundial que se realizaría cuatro años más tarde.
Al renunciar a su papel de anfitrión, el cuadro cafetero tuvo que jugar la eliminatoria para buscar su pase al torneo -que se jugaría en México-, pero no fue capaz de conseguirlo.
Con esos antecedentes, para 1987 el futbol a nivel selección era un tema sensible en Colombia. A eso se sumó la controversia provocada por el nombramiento como nuevo entrenador nacional de Francisco Maturana, quien tenía solo 38 años y apenas uno dirigiendo, por lo que la experiencia no figuraba entre sus credenciales.
El Pacho comenzó a renovar al equipo incluyendo en sus convocatorias a jóvenes como el arquero René Higuita y los mediocampistas Gabriel Gómez y Leonel Álvarez en detrimento de otros consolidados como el contención Eduardo Pimentel.
Encima, el nuevo seleccionador tendría que estrenarse en la Copa América, por lo que los colombianos se temían lo peor.
Sin embargo, la Tricolor se instaló en el juego por el tercer lugar de la Copa, gracias a su juego vertical, sólido atrás y contundente al frente, con un equipo en el que destacaban el temerario Higuita, que dejaba sin aliento al público cuando salía de su marco conduciendo la pelota y eludiendo rivales; el veloz y efectivo Arnoldo Iguarán, que terminaría como goleador del certamen; y por encima de ellos, Carlos Valderrama, distinguido por una estrambótica melena rizada rubia, cuya fantasía solo era equiparada por la de sus pases precisos, meditados y mortales.
Aún así, lucía complicado que pudieran llevarse el duelo por el tercer sitio, considerando que enfrente estaría Argentina. “¡Parecían invencibles! Contaban con el mejor jugador del mundo, como lo fue Maradona; eran el reciente campeón mundial y jugaban esa Copa ante su público”. Quien habla es Juan Jairo Galeano, integrante de aquella Colombia.
Cuando los equipos saltaron al césped del Monumental de Buenos Aires, los Ches eran favoritos, aunque algo jugaba a favor de la Tricolor, según Galeano: “La concientización del cuerpo técnico encabezado por Maturana sobre el cambio de mentalidad que debíamos tener para compromisos tan grandes como la Copa América”.
Ese cambio de mentalidad se puede ilustrar con un par de cosas que Galeano recuerda de la charla técnica previa al encuentro: “Pacho nos dijo que por ningún motivo nos tomáramos fotos ni le pidiéramos fotos o la camiseta a Maradona”.
El juego arrancó. La Albiceleste se acercó al arco rival, pero Higuita impidió que el anfitrión tomara la ventaja. Luego, los Cafeteros fueron al frente con velocidad y un potente zurdazo cruzado de Gómez abrió el marcador.
Mientras en el banquillo local Carlos Alberto Bilardo -quien, curiosamente, había dirigido a Colombia entre 1979 y 1981- se removía en su asiento y se acomodaba la corbata, en el campo Higuita y los postes impedían el tanto argentino. La mejor chance para empatar la tuvo Maradona, pero la perdió justo por ser demasiado Maradona: luego de hacer un control exquisito de zurda dentro del área, quedó perfilado para tirar de derecha pero quiso recortar de izquierda y un zarpazo del portero le quitó la bola.
Argentina siguió acosando la puerta colombiana, pero sin éxito. En cambio, en una contra colombiana, el Pibe Valderrama desactivó a tres defensas bombeando la pelota por encima de sus cabezas con un toque fino que Galeano transformó en el 2-0 con un derechazo raso.
En la segunda mitad, la incomodidad de Bilardo en el banco se convirtió en desesperación, pero ni sus nervios, ni sus indicaciones, ni el futbol del D10S ni nada sirvieron. Fue hasta que el partido estaba muriendo, en un corner y en medio de una neblina que entorpecía el juego y dificultaba la vista que Caniggia descontó con un cabezazo.
De cualquier modo, el rumbo del encuentro no cambió y Colombia le arrebató el tercer lugar de la Copa América al anfitrión. Galeano evoca aún ese triunfo junto con una frase de Maturana antes del encuentro: “Los fantasmas asustan más de lejos que de cerca”.