Los Dragones aztecas del Porto IV

Esta es la evolución de Raúl Gudiño…

ANTES DE SER DRAGÓN

Todo ha ocurrido muy rápido para Raúl Gudiño. En noviembre de 2013 disputó el Mundial Sub-17 en los Emiratos Árabes, donde destacó, además de por sus buenos reflejos y concentración, por anotar un penalti en la serie en la que México se impuso 11-10 a Brasil en Cuartos de Final. Su lucimiento fue mayor en ese dramático partido al atajar el disparo que valió el pase a semifinales en un torneo en el que el Tri fue subcampeón.

Con el Guadalajara, Gudiño fue campeón Sub-15 en 2011 y Sub-17 en 2013.

En 2014, mientras Raúl Gudiño militaba en el Sub-20 de las Chivas del Guadalajara, llegó la propuesta del Porto y se fue sin debutar en la Liga MX. “Me quedé con la espinita de jugar con Chivas en Primera División”, reconoció.

EL DATO GUDIÑO | El juvenil guardameta se fue a Europa “casi regalado”. Así lo expresó Néstor de la Torre, expresidente de Chivas, quien atribuyó a Francisco Palencia, exdirector deportivo, que haya tasado a Gudiño en 1.5 millones de euros.

DRAGÓN AZTECA

Gudiño juega con el Porto B y también entrena con el equipo mayor, donde se ha encontrado con Iker Casillas, portero campeón del mundo y bicampeón de Europa que le ha inspirado a soñar en grande.

En 2013 Raúl Gudiño tuvo un estupendo año: fue campeón con Chivas Sub-17 y subcampeón con México en el Mundial de la misma categoría. Como destacó en ambas instancias, fue fichado a préstamo por el Porto a finales de agosto de 2014.

“Cuando me firmaron, recordé que cuando era niño quería jugar en Europa. ¡Ya iba a hacer lo que había buscado!”, dice el portero de 19 años.

Raúl Gudiño fue enviado al Porto B, en el que empezó a tener actividad a partir de la jornada 16 de la Segunda Liga cuando disputó los 90 minutos en el triunfo 3-2 sobre Académico Viseu.

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También jugó la UEFA Youth League 2014-15 y brilló en el triunfo de los Dragones por 4-2 en penales (luego del 1-1 en 90 minutos) sobre el Real Madrid al atajar dos ejecuciones. “Las mágicas manos de Gudiño significaron los Cuartos de Final”, decía el encabezado de una nota en el portal fcporto.pt.

El Porto hizo válida su opción de compra el 17 de julio de 2015 por un costo de 1.5 millones de euros y en agosto Julen Lopetegui, en ese momento técnico del equipo de la Primeira Liga, lo unió a los entrenamientos de su plantel.

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Ahí conoció a Iker Casillas: “Sentí mucha motivación de ser su compañero porque cuando yo era niño lo veía en televisión”. Pero fue más importante el consejo que le dio el portero español bicampeón de Europa y campeón del mundo: “Me dijo que persiguiera mis sueños y que soñara en grande”. Casillas certificó el encuentro con una foto que subió a su perfil de Facebook en la que escribió: “Con el gran Raúl Gudiño…”.

Gudiño no ha debutado en la máxima categoría lusa, pero al tiempo que juega en el Porto B, reconoce que sigue aprendiendo: “He hecho pretemporada con el primer equipo y he ganado madurez y experiencia”.

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Omar Govea se formó en las filiales del San Luis. De ese equipo pasó al América para jugar en las divisiones inferiores, entre 2012 y 2013. Posteriormente llegaron para Govea las convocatorias a la selección Sub-17 de México y se ganó un lugar para ir al Mundial Emiratos Árabes 2013, en donde disputó seis partidos y fue subcampeón.

En ese torneo Omar Govea, quien se desempeña como medio de contención, atrajo la atención del Porto. “Creo que les gustó mi trato con la pelota”, consideró el joven potosino.

Fue cuestión de tiempo. Omar jugó en la Sub-20 del América, en 2014, y luego fue prestado a los Mineros de Zacatecas de la Liga de Ascenso. Ahí fue notificado que debía de viajar a Portugal para fichar con el Porto el 8 de julio de 2015, en un préstamo por 250 mil euros hasta junio de 2016. “Intentaré aprovecharlo de la mejor manera. El Porto es el club más importante de Portugal y uno de los mejores de Europa”, reconoció.

Omar Govea García ha sido titular habitual en el Porto B dirigido por Luis Castro. “Tengo que demostrar por qué estoy acá. Buscaré seguir creciendo como jugador y como persona”, asegura.

Mientras se afianza en el Porto B, Omar Nicolás ya tuvo contacto con la disciplina de Julen Lopetegui en el primer equipo, en el que juega Héctor Miguel Herrera, su ídolo. Al tiempo también sueña no solo con jugar en la Primeira Liga, sino de hacerlo en su club favorito en Europa: “Mi meta es jugar en el Real Madrid”.

Textos de Eduardo Venegas y Guillermo Vite