Cruz Azul, con década de hegemonía celeste

Después de un Apertura 2015 plagado de exabruptos y con el envión de la victoria frente a Santos, Cruz Azul tiene por delante el primero de cuatro partidos clave que debe ganar sí o sí para tratar de aspirar a liguilla de última hora. El rival será el Veracruz, séptimo mejor clasificado con 22 puntos, víctima de una dulce hegemonía celeste.

Cruz Azul no ha extraviado el poderío de máquina, al menos cuando abre el baúl del recuerdo y salen los registros de la última década ante los Tiburones. Desde entonces se han enfrentado en 13 partidos de fase regular y en seis de ellos, disputados en el feudo cementero, los capitalinos han sido imbatibles.

Y las victorias que han obtenido no han sido cualquier cosa. Tres de ellas han sido por goleada y la última de ellas fue un contundente 4-0 en el Clausura 2014. Eso sin contar que en suma, los Maquinistas atizaron 15 goles -promedio 2.5 por encuentro- y a cambio recibieron solo dos, cuando se midieron en el Clausura 2007.

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De la magnitud del duelo hay plena conciencia en Cruz Azul. “El equipo se dio cuenta que aun puede calificar a liguilla y sabemos que hay que dar este primer paso para conseguirlo”, dice el director técnico Tomás Boy, que busca su segunda victoria en los tres partidos que ha dirigido tras su nombramiento oficial.

El cotejo entre Cruz Azul y Veracruz tiene un dato bastante peculiar: en la historia de torneos cortos se han enfrentado cuatro veces de manera consecutiva en la Jornada 14 y en todas salió victoriosa la Máquina. El saldo total: 10 goles y solo 2 en contra.

Al margen de que los Cementeros firmen su peor época si por tercera vez en fila no clasifican a Liguilla, el equipo aun puede darle un giro argumental de última hora y romper con la ausencia de dos torneos. La ecuación será exprimir las bondades del formato de la Liga MX y a esos 15 puntos que hoy lo tiene en el sitio 16 de la clasificación le sume 12 más consiguiendo un pleno de victorias ante Veracruz, Toluca, Tigres y el partido pendiente que tiene ante Pachuca. “Si clasificamos no importan las formas”, afirma Boy.