Así vivieron el Mundial de Clubes: Marioni y Pachuca en 2008
Los Tuzos consiguieron una remontada eléctrica en los Cuartos de Final y después…
El futbol tiene un lado benévolo. Da segundas oportunidades, revanchas para volver a ilusionarse. Al Pachuca le brindó una en 2008, solo un año después de que el club debutará y regresara con las manos vacías tras ser eliminado en Cuartos de Final. ¿Hasta dónde serían capaces de llegar?.
El sueño era enfrentar al Manchester United de Alex Ferguson, amplio favorito en calidad de monarca de la Champions League. La odisea de aquel equipo que lideraba Christian Chaco Giménez, la cuenta Bruno Marioni, quien en aquella justa disputó su último partido con la camiseta del Pachuca.
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En Japón, cuando fuimos al Mundial de Clubes de 2008, nos encontramos con un detalle muy curioso: no esperábamos que hubiera tanto fanático japonés al futbol. El hotel en el que estábamos concentrados era visitado por muchos aficionados de ese país, quienes iban con manuales o revistas sobre futbol.
En una visita que hicimos a un centro comercial de Osaka, Gabriel Caballero, Damián Álvarez, Christian Giménez y yo nos encontramos a una japonesa fan del Pachuca. La chica nos sorprendió al llamarnos a todos por nuestros nombres, luego sacó su libro para que le firmáramos autógrafos y luego nos tomamos fotos con ella. La chica estaba súper feliz y nerviosa. Fue algo increíble vivir sus emociones.
En cuanto a lo futbolístico, en nuestro primer partido del torneo enfrentamos al equipo egipcio Al Ahly. Se nos complicó tanto el juego que al final del primer tiempo íbamos perdiendo 2-0. Cuando entramos al vestidor platicamos que debíamos de asumir la responsabilidad, cambiar la actitud. Teníamos un equipo de mucha experiencia y calidad con Miguel Calero, Caballero, Giménez y… ¡lo hicimos!Para el segundo tiempo fuimos más agresivos y empatamos con goles de Luis Montes y del Chaco. Luego, en el tiempo extra dimos la vuelta al marcador con otro gol del Chaco y uno de Damián Álvarez para conseguir el pase a las semifinales.
En esa fase enfrentamos a la Liga Deportiva de Quito, club que nos superó en todo momento y nos ganó 2-0. Nunca encontramos el funcionamiento adecuado y no pudimos doblegar a su defensa. Fue un golpe muy duro porque nuestro sueño era jugar la final ante el Manchester United.
Jugamos después el partido por el tercer lugar ante el local Gamba Osaka, pero con una menor motivación y con algunos cambios que hizo el profe Enrique Meza.
También perdimos ese día porque el ritmo de juego de ellos era más intenso que nuestra propuesta en la cual le dábamos prioridad al manejo de la pelota, pero como el futbol del Osaka se nos tornó más físico, nosotros no pudimos reaccionar del 1-0 y así terminamos el Mundial que no fue muy bueno para nosotros.
Texto tomado de la edición 216 de la Revista Futbol Total