El día que el Hachita enamoró a la afición de los Pumas
El América fue responsable del afecto de la afición auriazul hacia el argentino
Algo que hace que los jugadores de algún equipo se ganen el cariño de la afición es la entrega del mismo con la casaca del club, goles a racimos, títulos o estancias largas y exitosas; lamentablemente muchos elementos no corren con esa suerte, y la mayoría de las veces se ganan el desprecio de los suyos. Ese, parecía sería el caso de Daniel Hachita Ludueña con los Pumas, pero un partido contra el América cambio todo eso.
El argentino fue uno de los refuerzos más criticados a su llegada a la institución universitaria para el Clausura 2014; el equipo necesitaba goleadores, después de solo conseguir solo 8 tantos en todo el Apertura 2013, y la nula cosecha del Hachita con los Tuzos del Pachuca (2 goles en 1 año) era más que suficiente para ser juzgado.
“Nosotros sabíamos a lo que veníamos a lo que jugábamos, el equipo nos recibió muy bien, la institución nos abrió las puertas y nosotros hicimos oídos sordos a lo que se decía, nosotros la verdad nos tratamos de enfocar a adaptarnos al equipo”, fue la respuesta de Ludueña, en su llegada a Pumas, eludiendo las críticas.
En las primeras fechas del Clausura 2014 Pumas estaban mostrando otra cara, respecto a la del torneo pasado, pero las noticias no eran del todo alentadoras para el argentino quien, aunque contaba con la confianza del entrenador José Luis Trejo, no lograba hacerse presente en el campo. Un gol en la victoria 3-0 ante Tijuana era lo único que podía presumir.
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Es entonces, cuando llegó el clásico capitalino ante el América en el estadio Azteca, donde el Hachita pudo ganarse varios adeptos con su afición. El conjunto azulcrema venia de hilar dos derrotas, y no se podía permitir la tercera a manos de los felinos; pero Ludueña colaboró para que dicha derrota si se diera.
Al ex delantero del Santos de la Comarca le bastaron ocho minutos para cambiar las rechiflas en su contra por los coros con su nombre; aprovechó una mala recepción de Rubens Sambueza y una buena conducción de Javier Cortés, para recibir el balón en la media luna y definir de excelsa forma ante Moisés Muñoz.
El América parecía reaccionar con el tanto de Raúl Jiménez pero, de nueva cuenta, Ludueña consiguió bajar las aspiraciones del rival, con un misil, con mira al ángulo derecho del meta americanista para el 1-2 parcial. La cereza en el pastel la colocó Daniel Ramírez para una dulce victoria por 1-3 final.
Más allá de mostrar altanería ante el doblete, Daniel Ludueña se dijo agradecido de que sus goles ayudaron al objetivo trazado, además de admitir que siempre será especial marcarle al América.
“Se vienen dando las cosas en forma positiva, los triunfos ayudan a ratificar la confianza en cada uno, pero queremos seguir creciendo cada semana. Siempre es importante marcar y más aún en un clásico, ante el América. No me había tocado antes, pero las cosas se dieron bien y fue una fiesta completa, con la gente cantando, algo muy lindo para nosotros”.
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Daniel Ludueña ha permanecido en la institución universitaria en los últimos cuatro torneos y, aunque no ha logrado ser un titular indiscutible con los felinos, tanto en el interior del plantel, como la afición, saben que tienen un “as” bajo la manga con el Hachita en la banca, ya que su olfato goleador y sus pinceladas, nunca pasarán desapercibidas para los rivales, por lo que habrá que poner especial atención, por si quiere repetir sensaciones, y sale con la mira puesta en la meta azulcrema, este sábado en el Azteca.
“En lo personal, llegar a Pumas fue un desafío, porque es una gran institución; llegaron las críticas en mi contra, pero nunca hablé, me enfoqué en lo mío que es trabajar y responder en la cancha. Si las cosas salen bien, voy a trabajar el doble, porque estoy muy agradecido de jugar con los Pumas“, finalizó.