El japonés que saldrá campeón con Leicester City

Leicester City está en camino a conquistar un título inesperado. Le faltan cinco pasos para convertir lo imposible en real. Solo basta con creerlo afirma el estratega y guía de la hazaña, Claudio Ranieri. “¿Cómo puedo llegar a la élite? Si Vardy puede hacerlo, si Kanté puede hacerlo, quizás yo también puedo’.¿Qué necesitas para llegar?¿Un gran nombre? No.¿Un gran contrato? No.Solo necesitas abrir la mente, abrir el corazón, una batería cargada y correr con libertad”.

Esas características las tiene Shinji Okazaki, uno de los preferidos para la fanaticada. No es el más goleador, tampoco el más asistente, ni siquiera el más técnico, pero es todo un guerrero. El japonés fue uno de los refuerzos del Leicester City, que se hicieron de un jugador que corre los 90 minutos y más si es necesario por 11 millones de euros.

Esa cifra quizás suene un poco elevada para los cinco goles en 31 partidos que ha firmado el Samurai en la Premier League, sin embargo, hay un gol que vale la compra: su chilena en una victoria por la mínima ante Newcastle.  No solo por lo estético. Aquella pirueta trajo consigo una avalancha de emociones para el equipo, hizo creer en la hazaña y provocó la locura en los seguidores que se dan cita cada quince días en el King Power Stadium.

Para Okazaki no fue su primer gol de chilena como profesional. El más bello tampoco, pero no duda cuando sentencia que sí es el más importante. “He marcado uno así antes en la Bundesliga contra el Hannover, pero fue una situación completamente diferente”, agregó. “Este fue un juego mucho más importante y el objetivo que era ganar se cumplió. El Samurai gusta de rematar a un solo toque “soy instintivo, así es mi personaje.

Pero esa chilena ante Newcastle no calmó la furia de Claudio Ranieri. El italiano se manifestó molesto al medio tiempo y ha sido una de las pocas veces en que Okazaki temió en su estancia en Inglaterra.  ” El técnico estaba furioso en el medio tiempo. Él está sonriendo la mayor parte del tiempo, pero cuando entramos en el descanso estaba loco”, contó Shinji. “Verlo enojado también es bueno para nosotros, para evitar relajarnos”, añadió el japonés. 

Hubo momentos en la campaña en los que se dudó del Leicester City. Afortunadamente para sus aspiraciones, la camaradería y el trabajo en pos de cumplir un sueño han mantenido el barco a flote. El éxito está a solo cinco pasos. “Tengo compañeros que han producido grandes resultados. Son muy trabajadores y te apoyan en todo, una buena combinación. Es genial ser parte de un equipo así y es una de las razones por las que nos mantenemos en la cima”.

“Creo que una de las cosas que ayudan al equipo es el no tener presión. Nuestro espíritu es muy bueno para cada juego – bonito y sencillo. Sin presión”, afirma Okazaki que en esta odisea con el Leicester City es seguido por Japón y está a días de convertirse, si todo sigue como hasta ahora, en el segundo originario de la Tierra del Sol Naciente en consagrarse campeón en Inglaterra. Con 30 años se manifiesta en plena madurez futbolística y nada sería mejor regalo que el título. Un éxito poco esperado pero muy anhelado.